A pesar de que la inversión mundial en eficiencia energética para los edificios creció 16%, los gases contaminantes y la demanda energética siguen en incremento. Hoy los inmuebles representan el 40% de las emisiones totales de CO2 y consumo de energía global. Es por eso que la industria inmobiliaria es uno de los sectores con mayor capacidad de actuación en la mitigación del cambio climático. En La Haus te compartimos algunas estrategias clave para aportar a la descarbonización del sector de la construcción.
Para 2050, en el Acuerdo de París, la reducción de las emisiones de carbono por medio del uso de las energías renovables en edificios, es decir, la descarbonización, es un objetivo crucial, que implica una amplia gama de cambios.
Actualmente, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de las operaciones de los inmuebles han alcanzado un máximo histórico de alrededor de 10 GtCO2 (gigatoneladas de CO2). O sea, 5% de aumento desde 2020 y 2% más alto que el pico anterior en 2019. Así lo asegura el informe sobre la situación mundial de los edificios y la construcción en 2022 del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma).
No obstante, datos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), prevén que en el país, esta situación se agudizará. La razón es porque para 2050 se construirán en México 7 millones de viviendas. Las mismas que emitirán cerca de 25 millones de toneladas de gases de efecto invernadero. Puesto que los procesos tradicionales de edificación requieren del uso de combustibles fósiles y demanda energética.
Es por esto, que el sector inmobiliario debe aplicar sus estrategias de neutralidad en carbono tanto para los edificios nuevos como los ya existentes. Así como establecer objetivos y normativas que permitan alcanzar una industria de la construcción y de los edificios sostenible.
Para cumplir con el objetivo de cero emisiones netas de CO2 para 2050 a nivel mundial, el Pnuma considera que las emisiones del sector de la construcción deberán reducirse a la mitad para 2030. Esto requerirá una tasa anual de reducción de emisiones del 8 %, equivalente al impacto de la pandemia cada año.
No obstante, la demanda de energía para la calefacción, la refrigeración, la iluminación y el equipamiento de los edificios en 2021 aumentó cerca de un 4% respecto a 2020 y un 3% en relación con 2019.
Por otro lado, se prevé que el uso de recursos primarios se duplique de aquí a 2060, y que el acero, el hormigón y el cemento sean los principales responsables de las emisiones de gases de efecto invernadero. Los materiales utilizados en la construcción de edificios ya representan alrededor del 9% de las emisiones totales de CO2 relacionadas con el consumo de energía.
Es así como el carbono integrado en los edificios (las emisiones asociadas a los materiales y los procesos de construcción) debe abordarse para evitar que las medidas de ahorro de energía se vean perjudicadas. El sector puede reducir su impacto, por ejemplo, buscando materiales alternativos y descarbonizando los materiales convencionales.
Si bien cada país tiene contextos políticos, económicos y sociales diferentes, que facilitan o dificultan la implementación de estrategias, tener referentes es importante. Sobre todo si tomamos las ideas más valiosas y las adaptamos a nuestra realidad. Esta es una manera de obtener luz ante los grandes retos que se plantean en el camino.
Para ayudarte con esta tarea, en La Haus estudiamos dos planes estratégicos para la descarbonización en el sector inmobiliario. Uno de El Mundial de la Construcción, la plataforma que reúne las ferias parisinas Batimat, Ideobain e Interclim; y otro del World Green Building Council (WorldGBC), la principal organización de edificación sostenible en Europa. A continuación te resumimos los postulados más importantes de ambas propuestas.
Lograr que para 2050 todas las viviendas sean autosuficientes energéticamente y de reducir un 86% estas emisiones supone un desafío enorme. Es por eso que el año pasado, El Mundial de la Construcción realizó una gira por doce países europeos y africanos. Su propósito era aportar los datos de un completo estudio que ha realizado del mercado inmobiliario en Francia y presentar nueve propuestas prácticas con las que afrontar el reto climático en la construcción.
Estas son las acciones que según El Mundial de la Construcción deben implementar los diferentes actores para afrontar la descarbonización:
#BuildingLife es un proyecto liderado y coordinado por WorldGBC, en el que participaron 10 Green Building Councils europeos (Alemania, Croacia, España, Finlandia, Francia, Irlanda, Italia, Países Bajos, Polonia y Reino Unido). El propósito es impulsar la acción climática en el sector de la edificación y lograr la descarbonización.
Nosotros analizamos el #BuildingLife de España, que pretende abordar el impacto total de los edificios en todo su ciclo de vida. El ejercicio realizado por la organización comprende hitos y marcos de actuación que, relacionados entre sí, delimitan acciones concretas, definen plazos temporales y responsabilizan a los agentes en ese país. Es por eso que no profundizaremos en el caso específico y solo mencionaremos los ocho retos que dibujan el camino hacia la descarbonización del sector de la edificación.
En definitiva, el sector inmobiliario tiene un gran papel en el futuro del planeta. Y preservarlo es un imperativo para los negocios. Es claro que para lograr la descarbonización, no se puede seguir construyendo como hasta ahora. Es necesario hacer una transición hacia un modelo beneficioso para el medio ambiente, las personas y la economía. Ahora bien, este camino no se andará en un solo día y es imprescindible un sólido compañero de viaje. Un viaje que será largo. Por eso, recuerda que en La Haus te acompañamos y asesoramos en la creación de proyectos innovadores y responsables con el medio ambiente.